El cultivo de mango ha experimentado un crecimiento notable en España durante las últimas décadas. Esta fruta tropical, originaria del sur de Asia, ha encontrado en el clima mediterráneo del sur peninsular condiciones favorables para su desarrollo. Actualmente, España se encuentra entre los principales productores de mango en Europa.
El mango y sus características
El mango es una fruta tropical conocida por su sabor dulce y su alto contenido en nutrientes. Su pulpa es jugosa y aromática, y su color varía entre tonos verdes, amarillos, naranjas y rojizos en función de la variedad y el grado de maduración.
Entre sus principales cualidades destaca su alto contenido en vitaminas y minerales esenciales. En este sentido, la vitamina C fortalece el sistema inmunológico y mejora la producción de colágeno. La vitamina A, también presente, contribuye a la salud ocular y a la regeneración celular. Su alto contenido en fibra facilita la digestión y mejora la salud intestinal mientras que su alto nivel de antioxidantes ayuda a combatir el envejecimiento celular y a reducir el estrés oxidativo.
El mango es una fruta versátil que se consume fresca, en zumos, batidos o en diversas preparaciones.

El cultivo de mango en España
Aunque hablamos de una fruta originaria de climas tropicales, el sur de España ofrece condiciones adecuadas para su producción. El cultivo de mango se concentra principalmente en la Costa Tropical de Granada y la Axarquía malagueña, zonas que cuentan con temperaturas suaves durante el invierno y veranos cálidos. Estas condiciones permiten que la planta prospere y dé frutos de gran calidad.
Para que el cultivo de mango sea exitoso, es fundamental que las plantaciones cumplan con ciertas condiciones específicas.
- Clima: el mango requiere temperaturas cálidas y ausencia de heladas. La temperatura ideal oscila entre los 20°C y los 30°C. Temperaturas inferiores a 5°C pueden dañar la planta.
- Suelo: prefiere suelos bien drenados, ligeramente ácidos o neutros y con buen contenido en materia orgánica.
- Riego: si bien el mango tolera cierta sequía, su producción mejora con un riego controlado, especialmente en los meses más secos.
- Altitud: se recomienda tratarlo en altitudes inferiores a los seiscientos metros sobre el nivel del mar para evitar descensos bruscos de temperatura.
El cultivo de mango se ha consolidado en el sur de la península, donde las condiciones climáticas permiten la producción de esta fruta con éxito. La Axarquía, en Málaga, es la principal zona productora en España. Su clima subtropical y la proximidad al mar favorecen el desarrollo de los árboles y la maduración de los frutos. Otro lugar importante en este sentido es la Costa Tropical, en Granada, especialmente gracias a sus suelos fértiles y el clima templado que favorece una producción estable y de alta calidad. Por su parte, las islas Canarias, aunque en menor escala, también son un importante núcleo de producción debido a un clima cálido y una humedad constante que favorece a su crecimiento.
El cultivo de mango en España se ha consolidado como una actividad agrícola de gran potencial, especialmente en las regiones del sur donde el clima y las condiciones del suelo favorecen su producción. La creciente demanda de esta fruta y sus beneficios nutricionales han convertido a nuestro país en uno de los primeros productores europeos. La expansión de este cultivo no solo beneficia a los agricultores, sino que también refuerza la diversificación de la producción agrícola en el país.
Imagen principal de Choo Yut Shing.
Imagen central de Tomatores and friends.