¿En qué consiste el método Jadam?

El método Jadam es una forma de agricultura ecológica que busca la autosuficiencia respetando los ciclos naturales y reduciendo el uso de productos químicos. Uno de sus principales objetivos es lograr en cierta medida, una armonía natural entre el agricultor y el terreno que este trabaja.

Los orígenes del método Jadam se remontan a la década de los años 90 en Corea del Sur. Su principal ideólogo es Youngsang Cho, un agricultor y químico que supo unir los preceptos de la tradición agrícola coreana con los de la llamada Natural Farming, una escuela creada en los años 60 por su propio padre, otro eminente agricultor nacional cuyas teorías fueron ampliamente reconocidas en múltiples zonas de Asia y América. Para bautizar a su método, Youngsang Cho utilizó la frase coreana jayonul damut saramdul, “gente que ama la naturaleza”. En la actualidad, el grupo Jadam Organic Farming es el encargado de difundir los principios, ventajas y novedades relacionadas con esta práctica.

Principios del método Jadam

A grandes rasgos, los procedimientos agrícolas llevados a cabo mediante la aplicación de esta disciplina buscan alcanzar la manera de conservar las propiedades del suelo sin forzar los ciclos biológicos ni naturales y sin alterar el medio natural que rodea a un cultivo. Para ello, el método Jadam establece una serie de principios fundamentales.

• La vegetación espontánea, las malas hierbas, no se consideran perjudiciales ya que su presencia contribuye a la manutención de microorganismos beneficiosos. De esta manera, estas no deben ser eliminadas sino que, más bien, deben ser controladas con técnicas como el acolchado.

• Determinadas técnicas como la asociación de cultivos pueden ser muy beneficiosas para mantener activa la biodiversidad del terreno.

• Utilización de fertilizantes naturales como, por ejemplo, restos de cultivos troceados y enterrados bajo el suelo.

• Corrección de la salinidad de aguas duras mediante compuestos naturales.

• Uso de preparados ecológicos.

Preparados ecológicos de fabricación casera

Una de las principales características de este método agrícola es la utilización de preparados ecológicos que buscan contribuir al desarrollo de los cultivos al mismo tiempo que combaten de manera natural a las plagas y enfermedades. De esta manera, el método Jadam cuenta con una lista de recetas de fácil preparación que, además, están libres de patente para que cualquier agricultor pueda acceder a ella y elaborar sus propios compuestos.

Entre los preparados más frecuentes se encuentran aquellos dirigidos a combatir plagas, los fertilizantes y biopesticidas naturales, los bioestimulantes elaborados a partir de microorganismos y extractos vegetales, los fungicidas (conocidos como Azufre Líquido Jadam) o los compuestos especiales para cultivos concretos como el arroz o los cítricos.

Principales ventajas del método Jadam

Hoy en día, los partidarios de esta disciplina agrícola se encuentran prácticamente en los cinco continentes y, aunque su presencia no resulte excesivamente patente, su número no deja de crecer exponencialmente conforme pasa el tiempo. Entre las ventajas que estos destacan, pueden citarse las siguientes.

• Se trata de una práctica completamente respetuosa con el medio ambiente.

• Su aplicación requiere un coste económico realmente bajo. No en vano, el grupo de regula la aplicación de sus principios se autodefine como de agricultura ultra low cost.

• No se requieren conocimientos técnicos complejos, se trata de un método de muy fácil aplicación.

• El uso de preparados económicos y de sencilla realización contribuye a aumentar la productividad del terreno.

• Su aplicación puede darse tanto en pequeñas como en grandes extensiones, por lo que resulta una técnica realmente versátil.

Pese a que las ventajas del método Jadam sean evidentes, existen voces críticas que abogan por métodos que impliquen una mayor utilización de maquinaria y procedimientos no tan tradicionales. Tal vez, la clave del éxito radique en saber aunar bien ambas tendencias.