La calidad del aire es desde hace años uno de los puntos clave en los objetivos medioambientales de la Unión Europea. En este sentido, las normas Stage son un conjunto de medidas orientadas a reducir progresivamente las emisiones tóxicas de todo tipo de maquinaria a motor. Stage V, la última actualización de estas directrices, está vigente desde hace más de un año, aunque el tiempo límite para que los fabricantes adaptasen sus motores expiró hace relativamente poco.
El camino hacia la norma Stage V
Para comprender la evolución de estas normas hay que remontarse a 1996, cuando el Parlamento Europeo y la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) se reúnen con el fin de dar los primeros pasos en la reducción de emisiones desde maquinaria móvil no de carretera. Nace así la norma Stage 1 y su equivalente norteamericana, la Tier 1, que desde entonces se han desarrollado en paralelo y han fijado su punto de mira en el monóxido de carbono (CO), los óxidos de nitrógeno (NOx), los hirocarburos sin quemar (HC) y las partículas (PM).
En 2014 apareció la norma Stage IV, que pronto fue sustituida por la actual directriz. La Stage V, o Normativa Europea de Emisiones para maquinaria (NRHM) 2016/1628/CE, fue aprobada en 2016 y entro en vigor en enero de 2019. Sin embargo, esta fecha excluía a aquellos motores con una potencia entre los 56 kw y los 130 kw, para los que la directriz era válida a partir del 1 de enero de 2020. A partir de estas fechas, los fabricantes disponían de un tiempo de 18 meses para adecuar la fabricación de sus nuevos productos a los pormenores de la norma Stage V.
Nuevos retos en la fabricación de motores
Los vehículos afectados por esta normativa pueden clasificarse en dos tipos diferentes. Por un lado están los que cuentan con motores NRS: de chispa – ignición, impulsados por gasolina o gas y con una potencia menor a los 56 kw. Además, hay que contar con los motores NRE: de compresión – ignición y chispa – ignición con una potencia igual o superior a 56 kw.
En la siguiente tabla puede verse los límites de emisiones para motores NRS.
La siguiente tabla muestra los límites de emisiones para motores NRE.
La responsabilidad final del cumplimiento de la normativa Stage V recae sobre el fabricante, por lo que todo esto, como consecuencia, supone un desafío de adaptación para multitud de empresas que han de encontrar la forma de reducir las emisiones al mismo tiempo que se mantiene la eficacia de sus productos sin incidir en el consumo o en otras variables.
Este tipo de normativas tienen una orientación medioambiental que encaja con varios programas europeos como la Agenda 2020, que se creó con el objetivo de crear un sistema económico sostenible, integrador e inteligente. Es posible que las exigencias de la Stage V puedan suponer un reto y un esfuerzo extra para multitud de marcas y fabricantes, pero sin duda el horizonte global que se busca alcanzar con este tipo de acciones bien vale la pena.
Imagen principal: Jeremy Austin
Excelentes noticias, debemos apostar siempre por la salud de nuestro planeta y evitar contaminar menos, de lo contrario no habrá planeta y no tendremos lugar para construir mas motores.
Me ha gustado muy bien. Felicitaciones por este logro de los nuevos motores.