La vibración mecánica es el movimiento de un cuerpo en posición de equilibrio y sin que este se encuentre sometido a un desplazamiento neto. De esta manera, si un objeto que vibra entra en contacto con el cuerpo humano, le transmite la vibración. Algunos de los problemas de salud más frecuentes con los que puede enfrentarse cualquier tractorista durante la realización de su trabajo son los derivados precisamente de la absorción por parte de su cuerpo de las vibraciones del tractor.
La vibración mecánica sobre el cuerpo del tractorista
La transmisión de la vibración del tractor al cuerpo del operario puede verse incrementada por factores como un terreno irregular o una suspensión insuficiente en el vehículo. Generalmente, los tractores cuentan con una escasa capacidad de absorción que recae sobre los neumáticos, el asiento y la suspensión. Este hecho puede provocar que el movimiento del vehículo se transmita por todo el cuerpo del conductor incidiendo especialmente en determinadas partes como la espalda, los brazos y las manos. Los problemas de salud derivados de una exposición prolongada y no controlada a este tipo de vibración pueden resultar lo suficientemente graves como para plantearse adoptar medidas preventivas.
Muchos de los problemas de salud de un tractorista pueden deberse a la vibración mecánica del tractor. https://t.co/vMMFEZ60uP pic.twitter.com/83QhfCfF3v
— Repuestos Fuster (@RepuestosFuster) November 21, 2018
La vibración mecánica se mide mediante unos sensores llamados acelerómetros. Estos se colocan en diferentes lugares del tractor como el asiento o el suelo de la cabina y determinan la intensidad del movimiento en unidades de metros por segundo al cuadrado (m/s2). Según los parámetros obtenidos, se determina si la vibración mecánica es baja, moderada o alta de acuerdo a unos estándares sellados por la Unión Europea.
Factores a tener en cuenta
Al manejar un tractor, siempre existe un riesgo implícito para el tractorista derivado de las vibraciones absorbidas por el asiento. El cuerpo asimila todo el movimiento transmitido y es entonces cuando los daños físicos pueden comenzar a originarse. La intensidad de estos puede venir determinada por varios factores como los siguientes.
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La intensidad de la vibración, medida en m/s2 y que generalmente vendrá determinada por otros factores como el tipo de terreno sobre el que se esté trabajando o la labor que se esté llevando a cabo.
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Las condiciones físicas del tractorista. En este sentido habrá que atender a diferentes aspectos como el peso, la edad o la altura.
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La posición que el tractorista adopte a los mandos del vehículo.
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La vestimenta del conductor. Determinados tejidos resultarán mejores aislantes que otros a la hora de proteger las partes del cuerpo más sensibles hacia las vibraciones del tractor.
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El tiempo de exposición a las vibraciones.
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El estado del tractor. Un tractor en buen estado siempre será una mejor herramienta de trabajo; en este sentido serán fundamentales los componentes del mismo, así como la calidad de los repuestos agrícolas que se hayan instalado.
Medidas preventivas
Las medidas preventivas más eficaces para reducir el impacto de la vibración mecánica pasan por adaptar determinados componentes del tractor. En este sentido, el asiento es el elemento que más ha evolucionado y en la actualidad existen modelos preparados para absorber prácticamente la totalidad de la vibración mediante eficientes sistemas de suspensión y amortiguación. Por norma general, y más desde que este problema ha sido foco de debate en la Unión Europea, los fabricantes de vehículos agrícolas tienen en cuenta los efectos de la vibración a la hora de diseñar los diferentes componentes de un nuevo tractor.
La vibración mecánica es un hecho presente en casi cualquier tipo de trabajo agrícola que precise del manejo de un tractor. Prevenir las consecuencias negativas de la misma es una labor que debe realizarse tanto por parte de los fabricantes como de los tractoristas, que son quienes las sufren directamente en su propio cuerpo.